El otoño me emociona. Siempre lo siento como un auténtico renacer. Mudo mis hojitas caducas para recibir el frío y florecer de nuevo.
Siempre tengo la cabeza llena de ideas y me recuerda mucho a mi vida en Salamanca, cuando esta época olía a fin de Ferias y libros nuevos.
Vuelvo a la actividad frenética, a ilusiones y proyectos renovados y a dejar atrás los malos tragos del pasado, que con el tiempo se vuelven pequeñitos e insignificantes.
El otoño es pasear por un parque lleno de hojas y sacar del armario las rebecas cálidas que nos arropan cuando tomamos un café con viejas amigas.
El otoño es desnudez y reencuentros, historias pasadas y venideras, ropa de abrigo y pintalabios nuevos.
Me consta que este otoño va a ser una época muy feliz para muchas de mis personas queridas, incluyéndome a mi.
4 comentarios:
Parece mentira. Hoy justo, con un desayuno de café y zumo, sintiendo ya un poco ese fresquito que me hace abrirgarme un poco más de la cuenta hablaba de eso. De que este otoño/invierno creo que voy a sonreir a menudo. Siento como una ilusión que va creciendo cuanto más nublado está, o más me tengo que tapar por la noche. A contracorriente. Será eso, que el cuerpo siente un cambio, y eso se transforma en una nueva energía e ilusión.
Estamos pletóricos !!! jaja
Un besazo fuerte!
ay! yo también estoy con las alcalinas puestas... qué bien!!!
que bonito niña... a ver si este otoño nos desnuda de las hojas caducas y fortalece nuestras ramas, para encarar con ilusión lo que tenga preparado para nosotras...
Un besazo!
Que así sea! Me encanta esta época del año, las primeras lluvias...
Feliz otoño a todos!
Besitos,
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