Siempre he estado fascinada por este cuento y este personaje... Me resulta treendamente inspirador. Una adolescente ingénua (o no tanto?) que atraviesa un bosque para ir a llevarle una cesta de comida a su abuelita y se deja seducir por un lobo peludo... la imaginación se dispara.
La moda de este invierno está llena de guiños a este personaje que ya tiene hasta peli de acción. Lo que más me gusta de esta historia, es que cobra más protagonismo el lobo travestido y seductor que engatusa a la damisela que el cazador que en un acto de virilidad la salva de la perdición y la lujuria.
¿Acaso alguna caperucita roja necesita un cazador que la salve? Definitivamente, preferimos ser devoradas por las fauces del lobo...
Espero que os guste esta pequeña selección de prendas y complementos que me recuerda a esta linda y no tan ingenua jovencita...
San Fabrizzio
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Mandrágora fue nuestra tienda durante varios años, y durante muchos años
antes, unos 20, ya era una tienda de ropa, nosotros al tomar el mando la
modern...
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