
Me gusta el parón que hacemos justo el día antes de acabar el año. Disfruto mucho de este momento de recogimiento y suelo reflexionar bastante y hacer balance. No me gustan mucho las listas de buenos propósitos porque la verdad es que no suelo cumplirlas, así que para que me voy a molestar... Pero siempre me gusta hacer una pequeña lista con las grandes verdades que he aprendido durante este último año, que este, ha sido de aquella manera.
#lección 1Todos tenemos fecha de caducidadEste año he tenido la pérdida más importante de mi vida. Mi madre se fue al cielo y yo me quedé desamparada, sin familia. La vida es un suspiro y he tomado conciencia de que es corta, frágil y llena de cosas feas como para perder el tiempo con gente rara...
Desde Junio aprovecho cada instante de la gente que me rodea y devoro la vida.
#lección 2Amar sin restriccionesGracias a la lección 1 he aprendido que la familia es la que uno elige. Coincidir en el código de ADN con un montoncito de gente no lleva implícito la palabra amor. En algunos casos si y en otros no.
He aprendido que el único amor incondicional es de los padres a los hijos, pero que se puede amar sin red de seguridad a tus amigos, compañeros, vecinos, ciberamigos y gente de la calle. En cualquier rincón hay gente verdaderamente maravillosa que es una pena no conocer por miedos extraños a "es que luego me hacen daño". Amar de manera infinita es una auténtica liberación
#leccion 3El verdadero significado de la palabra respetoUna lección importante. Lo más difícil es hacerte respetar, que tus espacios vitales y mentales no sean invadidos de manera gratuita, pero eso implica decir "no" muchas veces sin sentirte culpable.
En el camino del autorespeto se pierden muchas personas, pero esto también hay que restetarlo.
He aprendido a decir NO.
#leccion 4
Decir lo que me apeteceSiempre que me lo pregunten... porque no hay nada más impertinente que la sinceridad descarnada y sin previo aviso.
Pero eso si, es liberador a tope.
#leccion 5
No hacer planesLa lección 1 ha sido tan dura que he aprendido que la vida es maravillosamente imprevisible. Te arrebata cosas que yo creía que eran para siempre, pero te rompe los planes para mostrarte caminos distintos, aventuras inesperadas que molan mucho.
PD: Gracias a todas las personas que son importantes en mi vida. Manu, Juan, Jose Gemar, Nani, Leo, María Gómez, María Vaz, Maca, Moi, Alex, Roodrigo, Leo, Roberto, Antonio, Ada, María Salinero, Ana, Laura, Ángela, Astrid, Fernando, Miriam, Luis, Luz, Vicen, Mikel, Iván, Miguel Calero, Jero, Carlos Iglesias, Rafa Ruiz, Rafa Pacheco, Sagra, Cristina, Cristinita, Fanny, Alfonso, Pol, Raúl B, Juan Pedro, Guille, Abel, Jose, Paloma, Javier, Gustavo, Jesús Risueño, Miguel Ángel, Luismi, Germán, Marina, Antonio, Jon, Arnaud, Beta, Luis Poján, Samo... y muchos más que pasaron por mi vida y los que quedan por pasar.